RECURSOS NATURALES: HÍDRICOS, FORESTALES, FLORA Y FAUNA
San Mateo Tlaltenango es uno de los tres pueblos originarios pertenecientes a la Alcaldía de Cuajimalpa de Morelos. Las tierras de San Mateo pertenecieron al Marquesado del Valle de Oaxaca hasta el 26 de agosto de 1571 año en que la Corona Española entregó las tierras a sus pobladores nativos.
La situación de este poblado en términos de recursos naturales es compleja, pues el suelo de conservación que posee, se encuentra dividido entre tierras de propiedad ejidal y tierras de propiedad comunal. En ese sentido, la tenencia de la tierra de propiedad social involucra prácticas complejas de gestión y apropiación.
El 6 de mayo de 1981 el Diario Oficial de la Federación reconoce y titula 1,954 hectáreas de terrenos boscosos para el poblado de San Mateo. En este reconocimiento se menciona las tierras que se encuentran históricamente en litigio con el poblado de Santa Rosa Xochiac y con el de la Magdalena Contreras. Estas tierras pertenecen a la comunidad agraria.
Por otra parte, se encuentra el Desierto de los Leones. El área ocupada en un primer momento por la orden de los carmelitas descalzos y luego tomado por la federación para implementar usos fabriles, fue decretado primer Parque Nacional por Venustiano Carranza en 1917. El área del Desierto de los Leones es de 1,529 hectáreas, una parte del total también corresponden a las tierras comunales de San Mateo Tlaltenango.
Desde el año de 1999, la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca firmó con el Gobierno del Distrito Federal el Acuerdo de Coordinación mediante el cual el Gobierno Federal transfirió la administración del Parque Nacional Desierto de los Leones al Gobierno del Distrito Federal. Este acuerdo vigente desde el año 2000 tiene como objetivo establecer una regulación apropiada que permita la operación del parque, así como la conservación y el manejo sustentable de sus recursos naturales a través de involucrar e integrar a los diferentes actores presentes en el área, en particular los habitantes de los pueblos vecinos. (Plan de Manejo: 2006)
Con todo y poseer riqueza forestal y de flora más los recursos hídricos, lamentablemente prevalece el entubamiento, la venta y el desvío del agua a otras áreas de la ciudad.
El Desierto de los Leones y el área boscosa de San Mateo son de gran importancia para la Ciudad de México. Se conoce que entre su población forestal se encuentra especies tan importantes como el oyamel, el pino, el cedro, el encino y el madroño. En cuanto a flora, se registran más de 392 especies y 102 especies de hongos. Con relación a los recursos hídricos encontramos que la región cuenta con 38 manantiales dentro del parque y otros más en el área comunal. Con todo y poseer riqueza forestal y de flora más los recursos hídricos, lamentablemente prevalece el entubamiento, la venta y el desvío del agua a otras áreas de la ciudad o bien el saqueo y usufructo de especies naturales del bosque.
Otro de los temas asociados a los recursos naturales y al suelo de conservación en San Mateo Tlaltenango se refiere al conflicto por sobreposición de linderos entre el ejido y la comunidad agraria. El ejido en San Mateo es resultado de una dotación que le otorga el Estado en 1922 con 250 hectáreas. En el ejido hay dos tipos de tierras, una se refiere al régimen parcelario y otro a las tierras de uso común, en el caso de San Mateo se tienen tierras de uso común. El padrón es de 128 ejidatarios hasta este momento.
Con la reforma al artículo 27 constitucional comienza a darse la venta de tierras ejidales de uso agrícola a partir de 1994. Se dividen y venden pequeños lotes con lo que el uso de suelo queda transformado, aunque no regularizado como se puede observar de acuerdo con la zonificación asignada en el Programa Delegacional de Cuajimalpa de Morelos que lo señala como de Rescate Ecológico. Si bien es cierto que en los años noventa la venta de tierra agrícola se masifica, el proceso de urbanización en San Mateo proviene de años antes cuando el pueblo rural de base agrícola cede a la presión urbana del desarrollo y la expansión de la zona corporativa de Santa Fe que arranca a fines de los años setenta e inicios de los ochenta del siglo pasado. En fechas recientes, la Alcaldía de Cuajimalpa ha entrado a un proceso para regular los asentamientos que se encuentran en zona de conservación y con esto poner fin a una condición de irregularidad que mantiene a muchas áreas de San Mateo vulnerables, así también esta iniciativa busca plantear mecanismos de contención de la mancha urbana en las áreas naturales con el fin de preservar los recursos que posee.
RECURSOS NATURALES: HÍDRICOS, FORESTALES, FLORA Y FAUNA
San Mateo Tlaltenango es uno de los tres pueblos originarios pertenecientes a la Alcaldía de Cuajimalpa de Morelos. Las tierras de San Mateo pertenecieron al Marquesado del Valle de Oaxaca hasta el 26 de agosto de 1571 año en que la Corona Española entregó las tierras a sus pobladores nativos.
La situación de este poblado en términos de recursos naturales es compleja, pues el suelo de conservación que posee, se encuentra dividido entre tierras de propiedad ejidal y tierras de propiedad comunal. En ese sentido, la tenencia de la tierra de propiedad social involucra prácticas complejas de gestión y apropiación.
El 6 de mayo de 1981 el Diario Oficial de la Federación reconoce y titula 1,954 hectáreas de terrenos boscosos para el poblado de San Mateo. En este reconocimiento se menciona las tierras que se encuentran históricamente en litigio con el poblado de Santa Rosa Xochiac y con el de la Magdalena Contreras. Estas tierras pertenecen a la comunidad agraria.
Por otra parte, se encuentra el Desierto de los Leones. El área ocupada en un primer momento por la orden de los carmelitas descalzos y luego tomado por la federación para implementar usos fabriles, fue decretado primer Parque Nacional por Venustiano Carranza en 1917. El área del Desierto de los Leones es de 1,529 hectáreas, una parte del total también corresponden a las tierras comunales de San Mateo Tlaltenango.
Desde el año de 1999, la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca firmó con el Gobierno del Distrito Federal el Acuerdo de Coordinación mediante el cual el Gobierno Federal transfirió la administración del Parque Nacional Desierto de los Leones al Gobierno del Distrito Federal. Este acuerdo vigente desde el año 2000 tiene como objetivo establecer una regulación apropiada que permita la operación del parque, así como la conservación y el manejo sustentable de sus recursos naturales a través de involucrar e integrar a los diferentes actores presentes en el área, en particular los habitantes de los pueblos vecinos. (Plan de Manejo: 2006)
Con todo y poseer riqueza forestal y de flora más los recursos hídricos, lamentablemente prevalece el entubamiento, la venta y el desvío del agua a otras áreas de la ciudad.
El Desierto de los Leones y el área boscosa de San Mateo son de gran importancia para la Ciudad de México. Se conoce que entre su población forestal se encuentra especies tan importantes como el oyamel, el pino, el cedro, el encino y el madroño. En cuanto a flora, se registran más de 392 especies y 102 especies de hongos. Con relación a los recursos hídricos encontramos que la región cuenta con 38 manantiales dentro del parque y otros más en el área comunal. Con todo y poseer riqueza forestal y de flora más los recursos hídricos, lamentablemente prevalece el entubamiento, la venta y el desvío del agua a otras áreas de la ciudad o bien el saqueo y usufructo de especies naturales del bosque.
Otro de los temas asociados a los recursos naturales y al suelo de conservación en San Mateo Tlaltenango se refiere al conflicto por sobreposición de linderos entre el ejido y la comunidad agraria. El ejido en San Mateo es resultado de una dotación que le otorga el Estado en 1922 con 250 hectáreas. En el ejido hay dos tipos de tierras, una se refiere al régimen parcelario y otro a las tierras de uso común, en el caso de San Mateo se tienen tierras de uso común. El padrón es de 128 ejidatarios hasta este momento.
Con la reforma al artículo 27 constitucional comienza a darse la venta de tierras ejidales de uso agrícola a partir de 1994. Se dividen y venden pequeños lotes con lo que el uso de suelo queda transformado, aunque no regularizado como se puede observar de acuerdo con la zonificación asignada en el Programa Delegacional de Cuajimalpa de Morelos que lo señala como de Rescate Ecológico. Si bien es cierto que en los años noventa la venta de tierra agrícola se masifica, el proceso de urbanización en San Mateo proviene de años antes cuando el pueblo rural de base agrícola cede a la presión urbana del desarrollo y la expansión de la zona corporativa de Santa Fe que arranca a fines de los años setenta e inicios de los ochenta del siglo pasado. En fechas recientes, la Alcaldía de Cuajimalpa ha entrado a un proceso para regular los asentamientos que se encuentran en zona de conservación y con esto poner fin a una condición de irregularidad que mantiene a muchas áreas de San Mateo vulnerables, así también esta iniciativa busca plantear mecanismos de contención de la mancha urbana en las áreas naturales con el fin de preservar los recursos que posee.